Los Los planetas Los planetas giran, Los planetas giran, dan Los planetas giran, dan vueltas Los planetas giran, dan vueltas y Los planetas giran, dan vueltas y nunca Los planetas giran, dan vueltas y nunca se Los planetas giran, dan vueltas y nunca se encuentran. Los planetas giran, dan vueltas y nunca se Los planetas giran, dan vueltas y nunca Los planetas giran, dan vueltas y Los planetas giran, dan vueltas Los planetas giran, dan Los planetas giran, Los planetas Los Ese Ese árbol Ese árbol concede Ese árbol concede deseos Ese árbol concede deseos porque Ese árbol concede deseos porque sus Ese árbol concede deseos porque sus frutos Ese árbol concede deseos porque sus frutos son Ese árbol concede deseos porque sus frutos son varitas Ese árbol concede deseos porque sus frutos son varitas mágicas Ese árbol concede deseos porque sus frutos son varitas Ese árbol concede deseos porque sus fr
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¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!! ...Jesús nació en un establo de Belén. María lo envolvió en pañales y lo recostó en un pesebre que José había preparado para él. Un grupo de pastores que acampaban por allí escucharon a los ángeles cantar, alegres, la buena noticia, y se acercaron al establo para adorar al niño... ...Al encontrar a Jesús, los magos, se postraron ante él para rendirle homenaje, y abrieron los cofres que contenían sus regalos: Oro, incienso y mirra... De El nacimiento de Jesús con stickers. Ed. Guadal Que Jesús inunde nuestros corazones con salud, amor y paz ... ¡lo demás viene solo!
CANCIÓN DEL ELEFANTE
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Un elefante se balanceaba sobre la tela de una araña , como veía que resistía fueron a llamar a otro elefante. Dos elefantes se balanceaban sobre la tela de una araña, como veían que resistía fueron a llamar a otro elefante... Cien elefantes se balanceaban sobre la tela de una araña, como veían que resistía fueron a llamar a otro elefante... Mil elefantes se balanceaban sobre la tela de una araña, como veían que resistía fueron a llamar a otro elefante... Un millón de elefantes se balanceaban sobre la tela de una araña, como veían que resistía fueron a llamar a otro elefante... Ningún elefante quedaba en la tierra y llamaron a un mosquito, el mosquito se posó y la tela se rompió. Mi versión de esta canción popular
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LOS TRAJES DE LA SELVA C asi nadie lo sabe, pero todos los animales son blancos. Blancos y lisos. Para difere nciarse, hace ya mucho pero mucho tiempo, cada animal eligió un traje. Los más coquetos lucían rayas o manchas, otros mas tranquilos prefirieron una piel lisa de color discreto, los más prácticos pensaron en un color para confundir a sus enemigos o en una piel más gruesa para protegerse…en fin, cuestión de gustos. Para bañarse, los animales dejaban su traje a la orilla del río, lo suficientemente separados como para no verse ni molestarse. Pero una tarde, el viento sopló más fuerte que de costumbre y arrastró los vestidos mezclándolos. El elefante, que había dejado su piel rugosa y gris, se vistió como la serpiente coral: a rayas rojas, blancas y negras. El rinoceronte lucía el traje del leopardo y la jirafa se veía muy chistosa con las rayas de la cebra. — ¡Estás rayada! ¡Estás rayada! —le gritó el mono colgado de una liana. Francisco - Jirafa con traje de cebra Enfurecida po
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Dos cortitos de FANTASMAS... buuuu!!!!!!
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Al caer de la tarde, dos desconocidos se encuentran en los oscuros corredores de una galería de cuadros. Con un ligero escalofrío, uno de ellos dijo: —Este lugar es siniestro.¿Usted cree en fantasmas? —Yo no —respondió el otro. —¿Y usted? —Yo sí —dijo el primero y desapareció. George Loring Frost Un viajero encuentra en el campo a un personaje con una cabeza completamente lisa como un huevo, sin un solo rasgo. Aterrorizado, sube a la carrera y el pide al campesino que arree el caballo de inmediato. —¿Que pasa? —le pregunta el campesino. —Fue que vi a un hombre que tenía el rostro como un huevo. —Entonces —respondió el campesino volviéndose —¿Tenia el mismo rostro que yo? Anónimo Japonés
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Adivina, adivinador... ¿que juego es?
A María le dolía mucho la cabeza y sudaba como si estuviera en el infierno.
1 termómetro es lo primero que agarró,
luego 2 aspirinas y 3 sorbos de agua para digerirla bien.
4 veces tomó su temperatura, volaba de fiebre.
con 5 ó 6 cubitos de hielo enfrió unos paños que colocó
7 veces en su cabeza.
Dio 8 pasos y se recostó en su cama. A los 9 minutos estaba durmiendo.
Cuando llegó al 10 sintió que por fin había tocado el cielo.
Es muy fácil... imposible no haberlo jugado alguna vez.... ¿Adivinaron?
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SOL EN LA LLUVIA Un día, igual a cualquier otro día de lluvia. El cielo gris y triste lloraba porque se iba Abril. Pero, en medio de la lluvia, en una casa brillaba el sol. Él cantaba, alegre y radiante. Ella reía acariciándose la panza. Era el gran día, y lo sabían. Subieron a su coche y llegaron a aquel edificio. La gente caminaba alrededor, pero ellos parecían no notarlo: se miraban el uno al otro, con una complicidad de a dos. Se despidieron cuando una señora vestida de blanco la condujo a una gran sala llena de luz. Había mucha gente, también de blanco. Pasaron unos minutos y entró él, cubierto con el mismo traje. Sólo se le veían los ojos, que se buscaron con los de ella, llenos de miedo y emoción. Ella lo buscó también con su mano, compartían los mismos sentimientos. —Ya está—dijo alguien.—Ahí viene. Sus manos se apretaron cada vez más fuerte. Un llanto.Y entonces todo tuvo sentido.
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Atrapada en el país de las maravillas, Alicia pregunta al gato de Cheshire: — Gatito, ¿que dirección debería tomar? — Eso depende de adonde quieras ir — responde el gato. — No se muy bien a donde quiero ir — confiesa Alicia. — Entonces no importa que dirección tomes —concluye el gato. Lewis Carroll – Alicia en el país de las maravillas.
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FAFA LA JIRAFA / LA SIESTA DEL OSO Autora: Débora Ballarella Editorial: Del Naranjo Colección: Ya se leer 1 octubre 2006 LA BIBLIA con stickers Autora: Débora Ballarella Editorial: Guadal Noviembre 2006 EL ARCA DE NOÉ con stickers Autora: Débora Ballarella Editorial: Guadal Junio 2007 EL NACIMIENTO DE JESUS con stickers Autora: Débora Ballarella Editorial: Guadal Junio 2007 JAQUE MATE Autora: Débora Ballarella Editorial: Guadal Noviembre 2009
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Nunca me gusto el cuento del gato con botas. Me parece horrible que los hermanos mayores sean tan egoístas con el menor, que el maldito gato se salga con la suya, y que triunfe la mentira y la codicia. Por eso escribí mi versión del cuento y estoy mucho mas contenta ahora!!!!! EL MARQUEZ DE CARABAS U na pareja de campesinos dejó como única herencia a sus tres hijos, su molino, su burro y su gato. Los tres hermanos eran muy unidos y no necesitaron repartir la herencia, ya que seguirían viviendo juntos y trabajando el molino. En la mesa nunca faltaba algo de comer, pero tampoco podían darse grandes lujos, y por eso a veces el menor se lamentaba: —¡Ojalá tuviese mucho dinero para poder comprar todo lo que se me ocurra! —No debeis afligiros, mi señor —dijo el gato en tono serio y pausado —, ya vereis como te sacaré de la miseria. ¿No te gustaría tener mucho dinero? —¿A quien no? —Consígueme una capa, un saco, un par de botas para andar entre los matorrales y un sombrero. Tu y yo seremos ri